El día del padre es un día muy especial para padres e hijos. En España se celebra el 19 de marzo, pero dependiendo del país se celebra un día u otro.
Durante todo el año, los padres (junto con las madres, claro) se ocupan de sus hijos. Les hacen la comida, les llevan al colegio, les compran juguetes, videojuegos, celebran sus cumpleaños, les llevan a las casas de sus amigos…
Pero el día del padre todo sucede al revés. Los hijos cuidan de sus padres, les hacen regalos…
Es un día de descanso para los padres, nada de regañinas ni discusiones.
Por supuesto tienen que cumplir con sus obligaciones: ir a trabajar, hacer la comida… pero nunca son tantas como en días normales.
Es un día de felicidad, tanto para los padres, por ser su día especial como para los hijos, porque es el día en el que comprenden la suerte que tienen por tener los padres que tienen y lo mucho que les quieren.
Normalmente los hijos pequeños regalan cosas como postales de felicitación, dibujos hecho por ellos mismos… Cuanto más mayores se hacen, más son los que empiezan a regalar libros, detalles, adornos; pero no se dan cuenta de que los padres lo único que quieren es que sus hijos sean felices, y que les quieran lo mismo que ellos quieren a sus hijos.
La gente a la que uno más quiere es su familia, y siempre desean ser felices junto a ella.
Irene Ada Picatoste
Alumna de 1ºC ESO